Vector X – Luis Antonio Vidal @vidal_38
Una tarde, el gobernador Francisco J. Santamaría salió a uno de los balcones de Palacio de Gobierno acompañado de su secretario particular a quien le dijo en tono de broma: “Desde aquí puedo ver Cacaos, mi pueblo natal, en Jalapa”.
Sin distinguir algo en el horizonte, porque nada había, respondió el ayudante: “Sí maestro, desde aquí se alcanza a ver”.
Santamaría siguió el juego: “Ahí está la casa donde nací y hasta veo la mata de mango en el patio”.
Pasando la navaja por la barbilla del también lexicógrafo, el secretario contestó a botepronto: “¡Oiga usted y hasta manguitos tiene!”.
Nada de eso ha cambiado en política.
Andrés Manuel López Obrador, declarado ayer presidente electo de México, advirtió hace unos días a legisladores de Morena no rodearse de lambiscones.
Los describió así: “Se reproducen en todos lados zalameros que te rodean y te empiezan a alabar. ¿Qué horas son? Las que usted quiera que sea señor.
Y los pintó de cuerpo entero: “Te llevan el portafolios, te abren la puerta del carro; achichincles, lambiscones. Cuidado con esos. Tengan los pies sobre la tierra, porque el poder es una tentación”.
Ayer, el presidente del Consejo Político Estatal de Morena, José Eduardo Beltrán, publicó una interesante reflexión atendiendo el consejo de AMLO no ser lambiscón: “Para el nuevo gobierno de Tabasco y Morena vendrán en fechas próximas dos pruebas que señalarán si se gobernará igual que siempre o habrá un cambio de fondo que siga los principios políticos, éticos y morales de AMLO.
“La primera trata de la forma de elegir liderazgos y comisiones en el Congreso; la otra es la dirigencia de Morena. En ambas se verá si el próximo gobernante impone y designa o se aplica la auténtica democracia. Es importante iniciar bien y no usar viejas y obvias maniobras”.
En pocas palabras, congruencia política, sin esos zalameros que hasta los dislates le aplauden a quien manda.
La Morralla
Abrazo solidario al estimado amigo Jorge Abdó por el sentido deceso de su señora madre. Descanse en paz *** Hasta mañana.
