Vector X – Luis Antonio Vidal @vidal_38
Andrés Manuel López Obrador se reunió la semana pasada con los Gobernadores de los estados, entre ellos el de Tabasco, Arturo Núñez. Fue el reencuentro de ambos, por lo menos en el terreno de lo público. Según se aprecia en la fotografía se trató de un saludo parco, distante, protocolario.
Algunos sabelotodos de la política presumen la existencia de un acuerdo entre los dos políticos para favorecer a Morena en las pasadas elecciones. En cambio, cercanos al mandatario han confiado a este columnista que las diferencias no se han zanjado.
Hace un par de años entrevisté al gobernador en vísperas de su cuarto informe, y al referirse a AMLO dijo con todas sus letras: «Arturo Núñez está muy indignado con López Obrador por la forma en que lo ha agraviado, me ha acusado de traidor, y jamás me he considerado un traidor a nadie ni a nada.
En mi línea de conducta en política he sido de una enorme congruencia y una enorme consecuencia, entonces simple y sencillamente porque haya nombrado a gente incapaz para organizar a su partido en Tabasco, no tiene derecho a culpar al gobernador de su autoderrota».
Se refirió también a su famosa frase con dedicatoria para AMLO «nos vemos a la salida»: «Mi condición de gobernador me lleva a ser agente de concordia; cuando ya no tenga esa responsabilidad institucional y tenga toda la libertad de ser sólo representante de mis propios derechos y obligaciones, entonces estaré en libertad de decir mis verdades… y las voy a decir».
Vueltas da la vida; ahora López Obrador tiene la sartén por el mango y debe existir una relación institucional. Expectación hay por saber si llegarán esas prometidas revelaciones a la hora de la salida.
LA MORRALLA
Como gato boca arriba defiende Martín Palacios tres diputaciones locales plurinominales. Una para él, por supuesto, para un segundo período, es decir, un premio a la holgazanería *** De moda los festivales, no faltará el zalamero que invente el festival del pejelagarto. *** Hasta el jueves.